En el mercado podemos encontrar perlas auténticas, de gran valor, y perlas sintéticas. Estas perlas artificiales son fabricadas por el hombre con un nucleo de  plástico o cerámica y recubiertos con pintura y barniz. Su calidad y durabilidad son infinitamente inferiores, y carecen de todo valor.

Podemos distinguir una perla auténtica:

:: Si las rozas con los dientes, su tacto será ligeramente "arenoso".

:: El agujero de la perla es limpio, sin abultamientos.

:: Si alguna vez se rayase, la perla verdadera deja ver la siguiente capa de nácar. No pierde esplendor. Con el tiempo, la perla falsa pierde brillo. Incluso podeis encontraros con antiestéticos desconchados, o llegarse a descubrir su "corazón" de plástico.

Esperamos os sirva de ayuda para que no os den gato por liebre. Las perlas son siempre imprescindibles en todo joyero que se precie, y representan un accesorio elegante en cualquier circunstancia.

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Collar largo de perlas de río en Misterios

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