Presente en múltiples culturas, de Oriente a Occidente, el culto a nuestros ancestros, es señal de respeto y veneración y atrae la buena suerte a nuestra vida.
Hacerles un llamamiento para que te presten su protección es muy sencillo. Realiza este ritual por la noche, antes de acostarte.
Necesitarás:
• Un espejo
• Una vela morada
• Papel y lápiz
En un papel grande dibuja tu árbol genealógico, llegando hasta tus bisabuelos o tatarabuelos por lo menos.
Coloca sobre la mesa el espejo y a su lado la vela morada. Sitúa frente a ti el árbol genealógico recién confeccionado. Enciende la bujía y el incienso.
Mirándote en el espejo, solicita su presencia:
“Manifiéstate ante mí en este espejo.
Muéstrame guía y consejo en esta encrucijada.
Por los lazos que nos unen”
Es posible que surja un rostro o notes una presencia …
Tras permanecer frente al espejo unos minutos contemplando tu imagen y la luz de la vela, apaga todo y recoge los restos del ritual.
Vete a dormir inmediatamente después. Posiblemente al día siguiente, ya encuentres la guía y el consejo que estabas buscando.